
8 pautas para startups sobre protección de datos
Si piensas que la protección de datos no va contigo porque tu proyecto no está relacionado directamente con las tecnologías más innovadoras, te equivocas.
Primero, lo que nos ha traído hasta aquí: ¿qué es el precio? Hablamos del valor del coste de un producto o servicio, expresado ya en dinero. Se mide en unidades monetarias y estas tienen un valor asignado que varía según cada país.
Así, el precio muestra la relación de compensación que existe entre los bienes y servicios del mercado. El acceso de las personas a dicho mercado se rige por las leyes de la oferta y la demanda y, en ocasiones, por regulaciones gubernamentales. Normalmente, el importe asignado a un producto determinado sube o baja según lo solicitado que esté, de ahí que se considere una guía económica que hace referencia a la producción y consumo de bienes y servicios.
Precio alzado. Se usa para estimar el coste de una obra, teniendo en cuenta la inflación del país en el que se llevará a cabo la misma. Es habitual en trabajos a medio y largo plazo, por lo que se ponderan las posibles fluctuaciones del importe de los materiales, la mano de obra y los servicios.
Precio bruto. El real, en el que los importes no han requerido ningún cálculo debido a rebajas, impuestos o descuentos.
Precio de coste. Aquel en el que la venta del producto o servicio no deja un margen de beneficio; no se perciben ganancias.
Precio de demanda. Es el que los consumidores están dispuestos a pagar por lo que obtienen a cambio.
Precio en derecho. Es designado con una contraprestación monetaria, solo válida en contratos de compraventa o de arrendamiento.
Precio de equilibrio. Es el de un producto o servicio ofrecido en el mercado, calculado según la relación existente entre oferta y demanda. Es decir, es el importe que los consumidores están dispuestos a pagar por algo que los productores sirven en determinada cantidad.
Precio fijo. Se trata del valor asignado a un producto que no está sujeto a rebajas o a regateo.
Precio FOB. Estas siglas se utilizan en el comercio internacional para designar el precio Franco A Bordo. Se refiere al valor concreto en una venta determinada: transporte, aranceles, seguros y demás gastos a los que se hacen frente antes de poner el producto o servicio en venta son asumidos por el comprador.
Precio de venta. Es el valor que se da desde un principio a determinado producto para su comercialización; no se tienen en cuenta descuentos ni impuestos, ya que hablamos del importe original que el fabricante ha sugerido con el fin de que el vendedor pueda percibir un margen de ganancia.
Precio de mercado. Es el inducido por distintas operaciones de compraventa reales.
Precio neto. Aquel que los consumidores pagan por un determinado producto o servicio, después de sumar o restar los impuestos o descuentos.
Precio de oferta. El designado por el vendedor del producto, al que hay que restar una parte (según criterios establecidos por la ley de cada país y por otros factores) que limitan las ganancias por las unidades vendidas.
Precio público. Cantidad exigida por la Administración como contraprestación por un determinado servicio.
Precio unitario. Es el que se asigna a cada unidad de un producto para que su venta pueda ser más detallada.
Como ves, la variedad de tipos de precio es alta, pero es necesario hacerse con esta terminología si tu objetivo es emprender, así que… ¡adelante!
Fuente: https://www.webyempresas.com/tipos-de-precios/
Foto de apertura: Austin Distel on Unsplash.
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